4 mitos sobre el tabaco

SALUD PULMONAR - 22 de abril de 2022

Cada año mueren 8 millones de personas a causa del tabaco, de las cuales, 7 millones, aproximadamente, lo hacen por consumo directo y, el resto, son fumadores pasivos. Todos hemos oído alguna vez, ciertas afirmaciones sobre el consumo de tabaco que damos por hecho que son ciertas, solo porque llevamos escuchándolas mucho tiempo.

En general, los fumadores tienden a justificar el consumo de esta sustancia con excusas muy variadas, algunas de las cuales no son ciertas y, por eso, hoy trataremos de arrojar luz sobre este tema.

Los cigarrillos bajos en nicotina

En los últimos años, se ha extendido la creencia que las nuevas formas de cigarrillos, así como los vapeadores, no son nocivos para la salud, ni cancerígenos. Esto es totalmente falso, ya que se ha demostrado que los cigarrillos bajos en nicotina, se consumen en mayor medida para poder sentir la misma sensación de saciedad que con los cigarrillos convencionales.
Por lo tanto, al aumentar el consumo, se equipara, en gran medida, su efecto perjudicial para la salud.
En el caso de los vapeadores, las partículas finas y ultra finas que contienen son muy nocivas para salud y, además, los ingredientes químicos y saborizantes inflaman el sistema respiratorio, lo que puede provocar cáncer y enfermedades obstructivas crónicas.

Fumar me relaja

Seguro que más de una vez habéis escuchado esta frase de un fumador. Realmente, los que practican este mal hábito creen de verdad que fumarse un cigarrillo les relaja, sin embargo, está demostrado que el tabaco es un estimulante y altera el sistema nervioso, por lo que su efecto en el organismo es totalmente contrario a lo que se cree. Esa “falsa” sensación de calma se produce por la abstinencia, la falta de nicotina produce ansiedad y solo fumando conseguimos aliviarla, eso sí, de forma momentánea.

Dejar de fumar engorda

Aunque es cierto que tras abandonar este mal hábito puede producirse un ligero aumento de peso, debido a la ansiedad y al estrés generados por el síndrome de abstinencia, si sabemos a qué alimentos recurrir y lo combinamos con la práctica de ejercicio físico, que no solo aliviará nuestro estrés, sino que además nos mantendrá en forma, dejar de fumar no tiene por qué suponer un aumento de peso. Consulta a un experto para que te guíe en esta buena decisión.

Ya es tarde para dejarlo, llevo muchos años fumando

Muchos fumadores se creen que después de varios años fumando da igual que dejen de fumar, puesto que no verán mejorada su salud. Sin embargo, las investigaciones sugieren que esto depende de cada persona y que por supuesto, a medida que vayan pasando los días desde que abandones este mal hábito te sentirás mejor, más vital, recuperarás el olfato que habías perdido, tendrás más energía, volverás a tener un color de piel saludable, sobre todo en el caso de la cara, reducirás en gran medida el riesgo de padecer cáncer de pulmón y otras enfermedades respiratorias graves, además, este riesgo irá disminuyendo progresivamente con el paso de los años. Ahorrarás mucho dinero que podrás destinar a actividades más saludables que te hagan feliz.

Por si todo esto fuera poco, si consigues dejarlo, al cabo de 15 años te sentirás tan sano como si nunca hubieras tenido este mal hábito.

Fuentes